MAS SOBRE NEWMAN. TRILEROS.

El otro día comentábamos unas desafortunadas palabras de Jack Valero.

Estas palabras no son excepción en la Iglesia que yo he vivido, la Iglesia post conciliar. De hecho, es costumbre en sacerdotes, catequistas, «laicos comprometidos»(1) y laicos de a pie salirse por la tangente cada vez que el Evangelio es ligeramente comprometido. En muchos de estos casos incluso dan una explicación totalmente contraria a las palabras de Jesús.

Dicen, «bueno aunque tal o cual parábola o predicación de Jesús dice esto…en realidad quería decir…». Y todos nos quedamos tan anchos. Esta costumbre, que es plaga, ha acercado al catolicismo de un manera alarmante a lo que es el protestantismo. Es la Sola Scriptura a la manera protestante; aunque la Iglesia ha dado una interpretación a esas palabras o ese pasaje, pues es quien posee la autoridad para ello, cada uno podemos leerlo y hacer nuestra propia interpretación. Y nadie con autoridad enmendará la plana. Sería como esos libros de «elige tu propia aventura».

Parece, a tenor de las palabras de Valero, que la costumbre se extenderá a los próximos santos, o se reescribirá la vida de los anteriores(2). Supongo que en aras a tender puentes, al ecumenismo(3), ecologismo o la paz mundial, a la manera en el que el mundo la entiende.

Con amigos como estos Newman no necesitaba enemigos. Pero vayamos al verdadero Newman, aquel que se dejó moldear totalmente por Cristo, obviando las consecuencias.

Una notas de la biografía de José Morales Marín sobre Newman,

Pág 141 El recuerdo de la crisis religiosa del siglo XVI y la figura decisiva de San Carlos Borromeo parecen encender su imaginación y sugerirle un cierto paralelismo con el momento que vie. «Igual que San Carlos en su día salvó a su tierra del Protestantismo y de los males que le acompañan -escribe a William Penny-, también nosotros tratamos ahora de hacer algo para resistir a los mismos enemigos de la Iglesia en Inglaterra».

Pág 138. Harriet, la mayor de las dos hermanas vivas, casada con Thomas Mozley, había interrumpido las relaciones con Newman en 1843, una vez advertidas con claridad sus tendencias católicas.

Pág 136 y 137 Espera por tanto nuevas e importantes conversiones y no se resigna a que Isaac Williams, John Keble, Thomas Keble y Edward Pusey permanezcan anglicanos. Sería tanto como renunciar a las convicciones y a las energías espírituales acumuladas trabajosamente a lo largo de doce años.

En los últimos días de 1845 Newman felicita por escrito a Mary Giberne con motivo de su conversión -que después de la de él era sólo cuestión de tiempo- y le pide oraciones por la de Williams, los Keble y Pusey. Pronto se dará cuenta, sin embargo, de que humanamente hablando espera contra toda esperanza.

El juicio que en conjunto hace del libro (Newman) es negativo. En la primera parte de la recensión critica Newman la incomprensión e injusticia del ambiente anglicano hacia los conversos. Muestra luego la incongruencia entre el atractivo horizonte religiosos que la Iglesia anglicana ofrece a los niños bautizados en ella y la radical incapacidad que sufre para cumplir las promesas de santificación que les ha hecho. Termina con una severísima proclamación: «la Iglesia anglicana está muerta; solo la voz que resucitó a la hija de Jairo podría revivirla«.

Era por parte de Pusey como una despedida pacífica, caritativa y afectuosa del converso. Pero este clima no duró mucho tiempo, en cuanto resultó evidente que Newman contemplaba el proselitismo con anglicanos.

Puede que me equivoque pero no veo en estos pocos párrafos nada de lo que afirmaban Valero o Aciprensa.

Me reafirmo en lo ya comentado, no llevó unión ni a Inglaterra ni a su propia familiar. Se abandonó a la voluntad de Dios sin importar que podría pasar. Nada de unionitas, bailecitos o cantos de guitarra con los anglicanos. Si por él hubiese sido toda Inglaterra hubiese amanecido católica la día siguiente de su conversión.

Una cosa más, es normal este falseamiento porque si el catolicismo jerárquico presentase a estos Santos tal cual pasaron por esta vida las preguntas serían evidentes y no quedarían en buen lugar. Quedaría al descubierto la estafa de la Fe que nos han trasladado todos estos años.

¿Qué podrían decir de ese nuevo pecado inventado por Francisco, el del proselitismo, cuando estos Santos no paraban de buscar almas para Cristo?

¿Qué podrían decir de la principal motivación de muchos de estos Santos que no era otro que la aniquilación del anglicanismo y el protestantismo?

¿Qué podrían decir de esa nueva costumbre por la que da igual militar en cualquier fe pues todas llevan al cielo? ¿Cómo explicarían las rupturas familiares, de amistades etc de muchos de estos Santos por entrar, simplemente, en la Iglesia Católica?

Por eso es necesario adulterar la vida de estos Santos porque la Fe ya se adulteró previamente y es necesario que una y otra coincidan, no sea que los trileros queden al descubierto.

Capitán Ryder

(1) Me refiero al catolicismo oficial, mucho del cual está pegado a las estructuras de la Iglesia, y se limita a transmitir lo que el Obispo de turno diga en cada caso.

(2) y (3) Adjunto un enlace, escrito en su momento, sobre las descanonizaciones. Si había que engrasar el ecumenismo se borraban santos y ya está.

EL CASO ANGELELLI (III)

 

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